Leer.es / Blog / Día Europeo del Deporte Escolar y la Literatura

El 25 de septiembre se celebra el Día Europeo del Deporte Escolar (European School Sport Day, ESSD en sus siglas en inglés). Este evento, que se desarrolla dentro de la Semana Europea del Deporte Escolar, es considerado por la Comisión Europea como el de mayor impacto desde el año 2017 y es concebido como un día escolar dedicado a divertirse y jugar juntos para promover la actividad física y la salud para todos. Se basa en la realización de actividades voluntarias por parte de cada escuela participante y cuenta con el apoyo de los coordinadores nacionales. Durante estos días se realizan varios actos con la intención de promover la actividad física y la salud para toda la ciudadanía. Más de 45 países de cuatro continentes celebran este evento de carácter mundial. Es, por tanto, uno de los días más importantes en el ámbito de la difusión de prácticas deportivas saludables en el entorno escolar, ya que trasciende las fronteras de Europa y se considera, además, el Día Internacional del Deporte Escolar. A pesar de la situación actual de pandemia provocada por el coronavirus, la organización del Día Europeo del Deporte Escolar ha previsto que se celebre, como en ediciones anteriores, en los centros educativos y, además, realizando algunas actividades externas e iniciativas virtuales.

Portada del libro El deporte y la literatura

Portada de El deporte y la literatura (Imagen tomada de CSD)

Desde leer.es queremos sumarnos a esta jornada con la recomendación de unas cuantas obras literarias infantiles y juveniles que tienen relación con el deporte. Porque, aunque parezca que la lectura es una actividad sedentaria, desde los tiempos de Juvenal ya se recomendaba una mens sana in corpore sano.

Son muchas las maneras como la lectura recreativa puede animar a los más jóvenes a realizar actividad física. Los libros pueden ser inspiración para juegos grupales inventados, extraídos de las aventuras que leemos en el mundo de la fantasía.

Las historias que leen los más pequeños pueden enseñar no solo a saborear las mieles de la victoria, sino también a aprender el valor de la derrota. No en vano, según Borges,«hay derrotas que tienen más dignidad que una victoria».

Portada del libro La soledad del corredor de fondo

Portada de La soledad del corredor de fondo (Imagen tomada del blog Un libro al día)

El deporte en la ficción transmite valores como el compañerismo, el esfuerzo y la superación personal. Puede ser una forma de encontrar el propio lugar en el mundo y de tramar la rebeldía personal, como le ocurre al protagonista de La soledad del corredor de fondo, que encuentra en la derrota su forma de protesta: «Me quedaré aquí esperando a que el de Gunthorpe o el de Aylesham pateen esta hierba y corran slap-slap hasta aquel trozo de tela extendido por encima de la cinta de llegada». Asimismo, el deporte enseña a convivir porque habla del respeto, la justicia y la solidaridad. Alienta el espíritu heroico: «no recuerdo muy bien dónde me puso la rodilla, me propinó un leve empellón y yo salí por los aires dando volteretas, como proyectado por una ballesta», recordaba Miguel Delibes; y la pasión del aficionado en las gradas: «yo fui hincha antes que aficionado. Anteponía al espectáculo el triunfo de mi equipo, el Real Valladolid Deportivo», confesaba el autor de Cinco horas con Mario. Con motivo del centenario del nacimiento de Delibesse realizarán distintas actividades este año, como la exposición en la Biblioteca Nacional de España, para recordar su obra y su vida.

Eduardo Galeano (Imagen tomada del Blog Mutuas Palabras)

Eduardo Galeano (Imagen tomada del Blog Mutuas Palabras)

Son muchos los autores que escogen el fútbol como protagonista de sus historias para reflexionar sobre cuestiones lingüísticas. Roberto Bolaño en su relato Buba;Delibes en Un deporte de caballeros;Eduardo Galeano en El fútbol a sol y sombra;Ryszard Kapuscinski en La guerra del fútbol y otros relatos;Kenzaburo Oé en El grito silencioso o Gregorio Salvador, en El fútbol y la vida. La épica del boxeo y su sordidez son también fuente de inspiración para muchos autores. Cortázar dedicó varias obras a gestas en el ring y a púgiles que admiró, como El noble arte, o Torito. También el boxeo fue el deporte elegido por Ignacio Aldecoa (Young Sánchez, «que salía al ring con todo prestado: las zapatillas, los calzones y la camiseta; con una toalla amarilla, que era lo único suyo, por los hombros») y Francisco Ayala (El boxeador y un ángel).

Retrato de Julio Cortázar (Imagen tomada de Wikipedia)

Retrato de Julio Cortázar (Imagen tomada de Wikipedia)

Además, mereció ser llevada a la gran pantalla la novela Million dollar baby, de F.X. Toole.

También le gustan los deportes sobre ruedas a la literatura: Ciclismo en Grignan, de Cortázar, bordea otros parajes igualmente interesantes y Miguel Delibes dedica unas páginas al ciclismo y al motociclismo en La vida sobre ruedas.

Imagen de un niño en bicicleta

Ciclista (Imagen tomada de Pixabay)

La Fundación Germán Sánchez Ruipérez, en colaboración con el Consejo Superior de Deportes, ofrece una larga lista de títulos de ficción e información para niños y jóvenes organizada en siete grupos en la publicación (de descarga gratuita) El deporte en la literatura infantil y juvenil:

  • El deporte de cada día: historias en las que los personajes practican deporte en el día a día.
  • A la carrera: historias de huidas o carreras de todo tipo.
  • El deporte al natural: la naturaleza como telón de fondo de la práctica deportiva.
  • Ronda de individuales: deportistas solitarios.
  • Todos a una: el deporte en equipo.
  • Bajo la antorcha: historias de los Juegos Olímpicos.
  • Deporte paso a paso: para conocer el funcionamiento de cada disciplina.

Y no faltan tampoco las recomendaciones «senior», el cómic, las películas y una completa bibliografía con teoría del deporte y la educación física.

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