Cada 26 de septiembre, desde el año 2001, se viene celebrando el Día Europeo de las Lenguas (DEL), organizado conjuntamente por el Consejo de Europa y la Comisión Europea. Esta celebración persigue, entre otros objetivos, destacar la importancia del aprendizaje de lenguas y promover la riqueza de la diversidad lingüística y cultural de Europa, que estamos llamados a preservar y potenciar.
El Año Europeo de las Lenguas 2001, impulsado por el Consejo de Europa y la Unión Europea, logró la implicación de millones de personas en los 45 países que se unieron al evento y organizaron múltiples actividades. Desde entonces, esta jornada impulsa el aprendizaje permanente de lenguas, tanto dentro como fuera de la escuela, y con fines muy distintos: estudios, necesidades laborales, intercambios, movilidad o disfrute.
Europa es un continente rico en lenguas: existen más de 200 lenguas europeas y en su territorio se hablan, además, otras procedentes de diferentes continentes. La sociedad globalizada en la que vivimos nos pone en contacto con otras culturas y lenguas. No solo el aprendizaje de lenguas es importante en el mundo laboral, sino que resulta beneficioso para jóvenes y adultos en otros ámbitos de la vida.
La diversidad lingüística es un instrumento clave para alcanzar una mayor comprensión intercultural, al mismo tiempo que constituye un elemento fundamental de la herencia cultural del continente. Por este motivo, el Consejo de Europa promueve el plurilingüismo en el ámbito europeo.
Esa potenciación del plurilingüismo se materializa a través del refuerzo de la diversidad lingüística, la ampliación de la variedad de lenguas que se aprenden —incluyendo las menos habladas—, y la necesidad de alcanzar un buen nivel en dos lenguas o más para poder tomar parte activa en la ciudadanía democrática de Europa.
La celebración de este día fue concebida desde un principio con un carácter flexible y descentralizado, de manera que los Estados miembros puedan establecer diferentes procesos. De este modo, el Día Europeo de las Lenguas lo constituye un mosaico de actividades y eventos que se suceden a lo largo de la jornada, repartidos por toda la geografía del continente y en los que participan instituciones nacionales, regionales y locales, asociaciones, entidades, centros educativos, individuos, etc. Este carácter flexible y descentralizado se manifiesta, igualmente, en un amplio abanico de destinatarios: desde las autoridades de los Estados miembros y sus socios potenciales, hasta el sector del voluntariado, pasando por los responsables políticos y el público en general.
El Centro Europeo de las Lenguas Modernas del Consejo de Europa (CELM) ha preparado una página web en formato multilingüe, donde ofrece diferentes recursos en línea dirigidos especialmente, pero no solo, al público escolar. Este año presenta como actividades y recursos novedosos, entre otros, «Lara’s journey through Europe’s regional and minority languages», «¿Eres un detective lingüístico?», o «La app de desafíos lingüísticos para agentes secretos», en los que se plantean retos y juegos para conocer más sobre las lenguas europeas. El CELM invita a todo el que lo desee a participar y a incluir sus acciones en el calendario de eventos DEL. Además, se pueden consultar todos los eventos que se están programando en este mapa interactivo.
Por su parte, la Comisión Europea ha preparado numerosas actividades a lo largo del continente. Destacan el acto central que será la conferencia en línea «La enseñanza de destrezas lingüísticas en el corazón del Espacio Europeo de Educación» y el café virtual «Lenguas, destrezas y tecnologías para el crecimiento económico».