El 23 de abril conmemoramos el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor, una fecha simbólica para la literatura universal, pues en este mismo día nacieron – o murieron – escritores como Cervantes, Shakespeare, Garcilaso de la Vega o Vladimir Nabokov, entre otros.
Aunque en 1995 la Conferencia General de la Unesco marcó esta fecha para rendir homenaje mundial al libro y sus autores, la historia de esta efeméride comienza décadas antes en nuestro país, cuando el escritor valenciano Vicente Clavel impulsó la propuesta de dedicar un día de cada año a celebrar la Fiesta del Libro, presentándola en la Cámara Oficial del Libro de Barcelona en 1923.
En un principio, el Día del Libro fue celebrado el 7 de octubre, hasta que en 1930 se traslada al 23 de abril. Más tarde, en 1995, sería cuando el gobierno español presentase a la Unesco la propuesta de establecer esta fecha como Día del Libro y del Derecho de Autor a escala mundial.
Desde entonces este día se ha convertido en una fiesta a través de la cual se pretende fomentar la lectura, reconocer la figura del autor y procurar el fortalecimiento de la industria editorial de cada país.
Asimismo, cada año, la Unesco y las organizaciones representantes de los sectores de la industria del libro (bibliotecas, autores y libreros) designan una ciudad como Capital Mundial del Libro. En esta edición, la localidad que ostenta este título es Río de Janeiro (Brasil).
Por otra parte, en esta jornada dedicada al libro y el derecho de autor, el Ministerio de Cultura de España ha preparado diversas actividades entre las que se encuentra la tradicional lectura continuada del Quijote, el tendido de banderolas en la fachada del edificio ministerial, la ceremonia de entrega del Premio Cervantes 2024, concedido al escritor Álvaro Pombo, y otras actividades que se desarrollarán en las bibliotecas públicas y museos estatales.
Los libros, para la Unesco, son herramientas vitales para acceder, transmitir y promover la educación, la ciencia, la cultura y la información. Desde Leer.es compartimos esta visión y ponemos a vuestro alcance recursos y proyectos educativos para trabajar la lectoescritura y las alfabetizaciones múltiples como, por ejemplo, la AMI o la alfabetización audiovisual y a través de los cuales se impulsa la cultura y la educación.
En este Día del Libro queremos celebrar y destacar a distintas escritoras de nuestro país, recogidas en el proyecto de las Sinsombrero, cuya historia no se ha visibilizado al mismo nivel que sus compañeros de la generación del 27. Os invitamos a que exploréis no solo sus obras sino también los diversos materiales y propuestas educativas que incluye este proyecto.
Por último, podéis echar un vistazo a la propuesta didáctica sobre Escritura creativa cuyo objetivo es ejercitar no solo la creatividad del alumnado, sino también la lectura, su comprensión y la reflexión, elaboración y presentación de las ideas.
